lunes, 27 de marzo de 2017

CÓMO DAR CALOR A MI NEGOCIO

  1. LA MEJOR CALEFACCIÓN PARA UNA REFORMA


Sobre todo, cuando los dueños de un negocio se plantean el reformar un local comercial para su implantación, no dejan lugar a la duda, y se decantan directamente por un sistema de climatización del tipo aire acondicionado con bomba de calor. Ciertamente, no ocupa espacio (se sitúa en el propio falso techo o en lo alto de las paredes, si es un split) y con una inversión única tenemos resueltas las 4 estaciones del año.  Además, para los que estamos más sensibilizados con el medio ambiente, podemos encontrar modelos realmente eficientes y con bajas emisiones de CO2.


Hoy, en Ingeniería para Optimistas os invitamos a ser curiosos, a preguntar con expectación, a no conformaros, a confiar en que existe un mundo de posibilidades, a no quedaros con lo fácil y a no perder la oportunidad de ser vosotros quienes elijáis lo que más se adapta a vuestras necesidades.


Nos centraremos más para este artículo en los casos de reforma, y es que, para nueva construcción, los nuevos proyectos de arquitectura ya incluyen últimas tecnologías y sistemas cada vez más eficientes para calor y frío.  Aun así, vamos a conocer qué opciones nos podemos encontrar y qué sistemas son más eficientes energéticamente.


Imagen 1: Calefacción. Fuente: The Noun Project.


  1. UN REPASO POR ALGUNAS INSTALACIONES DE CALEFACCIÓN


MEDIANTE ESTUFAS.  
_ DE BIOMASA
  • En determinados negocios, como restaurantes, o en algunas viviendas, pueden ser una buena solución.
  • Las de biomasa resultan muy eficientes y de bajo consumo.
  • Funcionan a base de pellets (restos de podas vegetales que se procesan y se transforman en forma como de tubitos, con alto poder calorífico).  
  • Su principal inconveniente es que su instalación necesita de una salida de humos y ésto, no es posible en todos los casos.
  • Además, hay que disponer de espacio extra para almacenar el combustible.
  • Su calor es confortable, parecido al de una chimenea.
Imagen 2: Formas de difusión de calor por estufa de biomasa. Fuente: Grupobiosan.

_ PORTÁTILES DE GAS
  • Las portátiles de bombona de butano, no necesitan ningún tipo de instalación, generan gran cantidad de calor y el coste de la energía resulta bastante asequible.
  • Actualmente la mayoría del mercado están etiquetadas con “sistema antiCO2” y ya existen modelos con termostato.
  • Las denominadas “de llama azul” resultan aún más eficientes (frente a las “catalíticas” y las de tipo “radiante”).
  • Su limitación principal es que se debe utilizar en espacios grandes y ventilados, a partir de 20 m2 y que hay que contar con espacio para una bombona de reserva, además de que la propia estufa es relativamente voluminosa.  


_ PORTÁTILES ELÉCTRICAS.
  • Pequeños calefactores, estufas de resistencia y similares, constituyen únicamente una solución para usos y situaciones muy puntuales, ya que no requieren instalación previa, aunque presentan alto consumo y muy baja eficiencia energética.
  • Los citamos expresamente a efectos de su presencia en el mercado.


MEDIANTE AIRE ACONDICIONADO CON BOMBA DE CALOR.
  • Es apropiado para climas templados, ya que cuando aumenta la temperatura entre el interior y el exterior, disminuye su eficacia, bajando considerablemente el rendimiento cuando se empiezan a rondar los 0ºC en la calle.
  • Cuando trabajan en condiciones óptimas, son de los sistemas más eficientes.
  • La comodidad de obtener la producción de frío y calor en un sólo aparato es su mayor atractivo.  
  • También cuenta con distintas opciones de instalación (split, cassette, por conductos), por lo que, con la ayuda de un buen instalador, se puede encontrar la solución más apropiada a las características de cada inmueble.  
  • Uno de los principales inconvenientes es la necesidad de situar la unidad exterior en fachada o azotea del edificio, lo que puede depender de las normas de la comunidad de propietarios en caso de vivir en un bloque.  
  • Quizás, de lo que más se quejan la mayoría de los usuarios es de la falta de confort del calor que generan, ya que la masa de aire caliente se queda en las partes altas de las estancias.  Eso significa que la habitación permanece bien caldeada, pero quienes permanecen tiempo sentados (como en oficinas) mantienen una sensación algo fría, sobre todo en zonas de costa, donde hay más humedad.

MEDIANTE INSTALACIÓN DE RADIADORES O SUELO RADIANTE.
  • Esta alternativa presenta gran variedad de opciones y de fuentes de energía, obteniendo diferentes resultados en cada caso.
  • Para el cálculo de su eficiencia energética influirá notablemente la fuente de energía utilizada, resultando óptimo su uso con energías renovables (geotermia, aerotermia y biomasa (cuando el calor que genera se conecta a una caldera de agua).


_ SUELO RADIANTE.
  • El calor desprendido del suelo radiante es considerado de los más confortables.
  • Otro de sus atractivos es el de permanecer totalmente oculto, sin ocupar ningún tipo de espacio adicional.
  • Además, es un sistema versátil, porque en verano puede circular agua fría, haciendo que baje la temperatura de la estancia.
  • Su mayor inconveniente es el coste de la inversión y la envergadura de la misma, sobre todo si es en una reforma.
Imagen 3: Instalación de suelo radiante. Fuente: Uponor.

_ RADIADORES
  • También es una fuente de calor que resulta muy confortable.
  • Tanto el material del radiador (aluminio, acero, hierro), como el tipo de fluido de su interior (aceite o agua) influyen también en el grado de eficiencia (además de la fuente de energía).
  • Los que funcionan mediante circuito de agua necesitan inversión en instalación, aunque menor que la del suelo radiante.  Los eléctricos sólo requieren de un enchufe.
  • Lo que menos gusta a los usuarios es la falta de flexibilidad en su instalación, ya que ocupa espacio en las paredes y esto determina en cierto modo la distribución del mobiliario en las estancias.


  1. CRITERIOS DE ELECCIÓN


POR LA FUENTE DE ENERGÍA:
  • En Ingeniería para Optimistas, por nuestro compromiso con el cuidado del Medio Ambiente, no podríamos poner otra opción en primer lugar.
  • Siempre que sea posible, optaremos por las energías renovables: bombas de calor geotérmicas o aerotérmicas, electricidad producida por energía solar o el calor generado por biomasa.
  • Si no es posible, recurriremos a la electricidad, siempre que hagamos un uso responsable de la misma, mediante aparatos inteligentes, termostatos o encendidos en cadena, por ejemplo.
  • Los combustibles fósiles (gas natural, gasoil y gas butano) son menos sostenibles con el medio ambiente, en cuanto a que su consumo está utilizando recursos limitados del Planeta.  Sin embargo, se pueden disminuir las emisiones de CO2 usando calderas de bajo consumo y bajas emisiones de gases tóxicos.  Cuenta con la ventaja de que son más económicos que la electricidad.


POR LAS CIRCUNSTANCIAS:
  • En casos de obra nueva, la actual normativa ya contempla la instalación de placas solares para agua caliente sanitaria (la que sale por los grifos), pero no necesariamente han de estar dimensionadas para calefacción.
  • Si además de obra nueva, se trata de autopromoción (cuando somos nosotros los que financiamos y construimos nuestra propia vivienda o edificio), conviene consultar a un experto energético para ver qué opción, de entre las renovables, es la que más se puede ajustar a nuestras circunstancias (inversión, orientación de la vivienda, zona climática, uso previsto del inmueble,...).
  • Cuando nos encontramos con un inmueble ya construido y hemos previsto hacer una reforma, las opciones se reducen (posiblemente no podremos instalar una caldera de biomasa, ni acudir a la geotermia, y puede que no exista gas natural en nuestro municipio).  En este caso os recomiendo actuar siguiendo varias recomendaciones, como las del siguiente apartado.


  1. RECOMENDACIONES PARA UNA REFORMA


  • Dar prioridad a los aislamientos térmicos en los paramentos exteriores (fachadas y también techos, si están en contacto con el exterior) y en los cerramientos (escaparates, puertas, ventanas), utilizando materiales específicos para ello.  
  • Atender al proceso constructivo, en especial a cómo se realiza la ejecución de las juntas, evitando que se puedan formar, por un lado puentes térmicos, y por otro, condensaciones, no olvidando instalar también un buen sistema de ventilación.
  • Contar con buenos profesionales que, en función de la zona climática, de la orientación del inmueble, del año de construcción del edificio y del uso previsto, dimensionen adecuadamente nuestras instalaciones.
  • Centrándonos en la calefacción, y si vamos a decantarnos por un sistema de aire acondicionado con bomba de calor, evaluar soluciones de apoyo, al menos para las épocas más frías.


  1. OTRAS ALTERNATIVAS EN EL MERCADO PARA GENERAR CALOR.


Si algo nos caracteriza a los seguidores de Ingeniería para Optimistas es, que además de nuestra vocación por el cuidado del Medio Ambiente, nos adaptamos a la realidad y aplicamos el sentido común siempre que hace falta.


Si, como nuevo emprendedor, alquilo un local a pie de calle para montar mi pequeño negocio, lo normal será encontrarme con pocos metros cuadrados y con un presupuesto bastante ajustado para hacer la implantación.  


En el caso de las viviendas de segunda residencia, quizás necesitemos también una solución de calefacción eficiente, priorizando una inversión reducida.


En el mercado nos podemos encontrar con soluciones interesantes, apoyadas por fabricantes sólidos, que, bien analizadas, pueden constituir la respuesta a nuestras necesidades.  Veamos dos ejemplos.


EL RADIADOR ELÉCTRICO SERIE D DE LA MARCA ROINTE.
  • Proporciona un alto rendimiento calorífico con un consumo reducido: permite alcanzar la potencia nominal con un 32% de consumo.  La ventaja de ésto radica en la posibilidad de no tener que contratar más potencia (aunque esto dependerá de varios factores).
  • Dispone de un ensayo de eficiencia energética, fundamental para documentar su rendimiento a la hora del cálculo de la CEE (certificación de eficiencia energética) del inmueble donde esté instalado, permitiendo obtener una calificación alta y realista.
  • Una de sus funciones de ahorro energético es la denominada  “ventanas abiertas”, un autoapagado en caso de detectar una bajada brusca de temperatura en un corto período de tiempo.
  • En el caso de instalación de varios radiadores en un mismo inmueble, cuenta con una función de inicio escalonado, evitando picos de consumo.
  • Además de ser programable, dispone de la posibilidad de limitar las temperaturas máximas de trabajo.
  • La principal novedad es el control total de la instalación desde el móvil, a través de WI-FI, incluyendo un control detallado del gasto.
  • Para saber más: Rointe serie D
Imagen 4: Radiador Rointe Serie D. Fuente: Rointe.

EL PANEL POR INFRARROJOS DE LA MARCA ThermIQ
  • Presenta un elevado ahorro energético y la posibilidad de alimentarlo con energías limpias, como la solar o la eólica, una vez transformadas en electricidad.
  • La radiación infrarroja no está relacionada con la emisión de rayos UV y no es cancerígena, por lo que no es perjudicial para la salud.
  • Este sistema actúa, además de por emisión directa del calor, calentando las superficies como paredes, suelos, muebles, personas, produciendo de este modo una convección natural.
  • Permite que se le adapte desde un termostato, hasta un controlador GSM, para ponerlo en marcha con una llamada.
  • Una de las principales novedades que presenta es su ubicación en el techo, como una lámpara, o en la pared a modo de cuadro, sin restar nada del espacio útil del que disponemos.
  • La segunda novedad destacable es la personalización, muy útil en oficinas (donde cada persona tiene distintas necesidades de calefacción), puesto que permite que cada zona, dentro de una misma estancia, se mantenga a distinta temperatura.
  • Para saber más: ThermIQ calefaccion
  • Y para saber más sobre los infrarrojos: Protección infrarroja

Imagen 5: Calefacción por infrarrojos en oficina. Fuente: ThermIQ.



  1. CONSUMO RESPONSABLE
A pesar de todo, si no tenemos la oportunidad de utilizar energías totalmente limpias, y aunque optemos por alternativas eficientes, en nuestra mano está el hacer un consumo responsable.  Esta es, sin duda, la manera más fácil de ahorrar dinero, de consumir menos recursos y de emitir menos contaminantes a la atmósfera.


De nosotros depende el apagar la calefacción cuando no se necesita, el llevar un buen mantenimiento (imprescindible para sistemas como los de aire acondicionado), instalar termostatos y zonificar estancias.


Esta es nuestra aportación al medio ambiente y en ningún caso debemos renunciar a ello. Es nuestra hebra de hilo en el tapiz de nuestro planeta, parece insignificante, pero sin la suma de cada uno de los hilos no existiría ese tapiz.


¿Qué opináis? ¿Estáis de acuerdo en la importancia de la eficiencia energética?


Para saber más, os invito a releer el artículo sobre Cómo interpretar una CEE, donde también acabamos destacando la importancia de las medidas de ahorro en el consumo.